El Juzgado de lo Penal 1 de Zamora ha impuesto una condena de ocho meses de prisión, y dos años de inhabilitación para el ejercicio de profesión u oficio que tenga relación con los animales. Además, la condena incluye la obligación de indemnizar con 650 euros a la Consejería de Fomento, y a unos 450 euros a Defensa Animal Zamora, así como al pago de las costas del procedimiento.

El proceso judicial se inició tras una denuncia interpuesta por Defensa Animal Zamora, cuyo abogado ha sido Daniel Dorado, presidente del Centro Legal para la Defensa de los Animales.

La Sentencia considera probado que el condenado mató mediante un disparo a varios de sus perros desde 2011 hasta 2014. Tras la excavación realizada en la finca del condenado, se hallaron siete cráneos de perro, cinco de ellos con orificio de bala. Tal y como manifestó el perito veterinario, dichos disparos son compatibles con un sufrimiento para los animales.

La sentencia indica: “La muerte por disparo despué de haberlos atado a un árbol para inmovilizarlos, en humanos y en animales, es una muerte angustiosa, lo cual es de público conocimiento, y además puede no ser inmediata, sino producir una agonía que puede durar varios minutos como mínimo”.