La “Batalla de las Ratas” del Puig, en Valencia, acabó en una lamentable agresión de los más de 200 asistentes al acto contra la redactora y la fotoperiodista del diario Levante-EMV, que se encontraban en el lugar para cubrir el acto. La multitud se abalanzó y rodeó, insultando y amenazando a las profesionales, hasta llegar al punto de agredir físicamente por la espalda a la fotógrafa, quien recibió un puñetazo, tirones de pelo y otras agresiones. Un joven de la localidad fue llevado a dependencias policiales por estos ataques.

Los hechos ocurrieron alrededor de las cinco de la tarde. El gentío se agolpaba en la plaza de la Constitución del Puig, donde se celebra tradicionalmente este festejo, que consiste en romper unas cucañas en el interior de las cuales hay ratas muertas, con las que después se hace una “batalla”.

La polémica por el uso de estas ratas desató las críticas de las asociaciones protectoras de animales, razón por la cual el asunto había suscitado amplio interés mediático. “El ambiente estaba caldeado, iban a por ellas”, comentó a este diario Cristina, presente en ese momento.

La intriga estaba en si habrían ratas o no. Finalmente las hubo, y con la suelta del primer roedor empezó la trifulca. La fotógrafa consiguió hacer varias fotos pero pronto se encontró con que varios asistentes se interponían entre ella y el objeto de la instantánea. Poco a poco la multitud comenzó a cercar a ambas trabajadoras, entre gritos e insultos: “Iros a vuestra puta casa” o “venís aquí a jodernos”.

Poco después, alguien del barullo arrancó violentamente de las manos la cámara de la reportera. El instrumento de trabajo, valorado en unos 6.000 euros, desapareció por más de media hora y fue recuperado instantes antes de que un grupo de chavales la destrozaran, según la persona que la rescató.

Esta tensa situación se prolongó hasta que dos festeros sacaron de la plaza a ambas reporteras. “Nos sacaron como haciéndonos un favor, porque estábamos protestando por no poder ejercer nuestro trabajo”, contó la redactora. “Nos dijeron: ‘Qué preferís, ¿quedaros aquí o que no os saquemos? A nosotros nos da igual’”.

Los hechos quedaron registrados por el equipo de cámaras de Canal 9, quien relató la agresión en su telediario de la noche. En las imágenes de la cadena pública se observa como la turba de decenas de personas atacan y rodean a las trabajadoras, las cuales, tras estas agresiones, fueron llevadas a un callejón que queda cerca de la plaza.

Hasta el momento no había ninguna fuerza de seguridad en el lugar de los hechos. “Allí no había nadie, nos dijeron que el Seprona merodeaba para controlar lo de las ratas, pero nadie más”, explicó la periodista. En cuestión de diez minutos apareció un furgón de la Guardia Civil e instantes después la fotógrafa identificó al que le dio el puñetazo en la espalda, un joven de la localidad, por lo que fue llevado al cuartel de la Guardia Civil del Puig.

Pero el esperpéntico espectáculo no terminó ahí. Mientras las reporteras esperaban a la Guardia Civil (e incluso en su presencia), la muchedumbre continuó instigando a las profesionales. “Todavía os pasa poco”, gritó una mujer de unos 50 años. “Yo le hubiera roto la cámara en la cabeza”, añadía otro.

Al final, tuvieron que salir con furgón policial de allí porque la hostilidad hacia ellas no cesó en ningún momento.

La denominada “batalla de ratas” se celebra en el marco de las fiestas patronales en honor de San Pedro Nolasco, y según el Partido Animalista – PACMA los quintos del pueblo encierran en pequeñas vasijas de barro a los roedores.

El espectáculo consiste en la rotura a palos de las vasijas con los animales dentro, hasta que al romperse cae el animal y es “golpeado, pisoteado o lanzado contra el suelo o las paredes para el regocijo y la diversión de los asistentes”, según el Partido Animalista – PACMA.

Fuente: informacion.es

Desde el Centro Legal para la Defensa de los Animales mostramos nuestra apoyo y solidaridad hacia las periodistas agredidas, y reclamamos que se garantice el derecho de los profesionales a realizar su trabajo.