El Ministerio Fiscal y la defensa del vecino de Cáceres acusado de dar muerte a sus caballos han acordado una pena de 18 meses de prisión, y cuatro años y medio de inhabilitación para ejercer la actividad ganadera profesional con caballos.

La Sala de lo Penal de Cáceres ha suspendido hoy el juicio contra Antonio R.M, acusado de un delito continuado de maltrato animal por dejar morir de inanición a varios caballos de su propiedad en una parcela del Polígono Ganadero de la capital cacereña.

En concreto, han sido acordados tres delitos de maltrato, con un año y medio de prisión; así como tres faltas de malos tratos, con tres meses de multa con un valor de 90 euros, según han informado fuentes de la Fiscalía a Efe.

La pena de prisión ha sido sustituida por una multa de tres años, a razón de 10 euros al día, con un valor total de 10.950 euros, según se explica desde la Fiscalía.

El informe de acusación del Ministerio Fiscal, al que ha tenido acceso Efe, recoge que el imputado dejó morir en 2009 a un caballo en el interior de la parcela por “falta de cuidados imprescindibles para su supervivencia, tales como comida, bebida y asistencia veterinaria”.

Ese mismo año, “intentó deshacerse del cadáver de otro ejemplar al que había dejado morir dentro de su parcela, en las mismas condiciones”; a lo que se une otro caso en 2010, cuando dejó morir a un tercer caballo de inanición, “abandonando el cadáver entre los demás caballos y perros”.

“A falta de alimento, éstos se comían al caballo muerto, presentando los animales síntomas evidentes de desnutrición”, recoge el informe de la Fiscalía.

También se recoge que el acusado repartía a los animales por diferentes lugares, algunos colindantes con la vía pública, para mantenerlos con pasto ajeno, a los cuáles tampoco suministraba agua para beber libremente.

Por este motivo, el Ayuntamiento de Cáceres incoó hasta 10 expedientes administrativos entre los años 2008 y 2009 por dejar los animales en la vía o las inmediaciones, unas faltas a las que se une una condena del Juzgado de lo Penal.

En concreto, el juzgado le condenó en 2010 por un delito contra la seguridad vial, al provocar un accidente de tráfico con uno de sus caballos que también murió en el suceso.

Por otro lado, el informe del Ministerio Fiscal recoge el caso de una docena de equinos con una “extrema delgadez”, así como la presencia de restos óseos de otro ejemplar enterrado entre estiércol, un animal que no falleció por “ninguna enfermedad infecto-contagiosa” y que vivía en las mismas condiciones que el resto.

Apunta también que hasta la explotación ganadera “no ha acudido ningún veterinario desde el año 2007″, a pesar de que el veterinario a quien le corresponde “ha intentado ponerse en contacto con el imputado en diferentes ocasiones, para el control sanitario de los animales”.

Fuente: ABC